En realidad, la ética es un término sumamente fuera del alcance de nuestra gente, es decir, de toda la gente que nos decimos mexicanos. Que difícil es acceder al significado de una palabra cuya utilización en nuestra sociedad es prácticamente nula.
Por doquier vemos infidelidad, piratería, morbo, delincuencia, corrupción y otros actos inadecuados que a la vista del mexicano parecieran inofensivos e incluso algunos de ellos correctos; pero, ¿qué le vamos a hacer, si así es México?
Pienso que el país está tan viciado de estas situaciones que sería difícil revertir este pensamiento poco favorable de nuestra sociedad, la cuestión es que habemos un sector social que debe permanecer inmaculado ante estos pensamientos, un sector que día con día se prepara para hacer un país mejor y un sector que nos hacemos llamar universitarios no solo por asistir a una facultad de estudios superiores, sino también porque tenemos la dicha de formar parte de una clase que piensa de distinta forma al resto de la sociedad.
Es por ello que dentro y fuera del aula, nosotros los universitarios, debemos tener bien claro el concepto de la ética, pues esta nos invita a actuar con valores positivos como el respeto, la tolerancia, la honestidad, entre otros. Esto más aún cuando se recorre por un campo como el de la comunicación y el periodismo, donde la importancia de estos valores se duplica al tener la responsabilidad de ser quienes tenemos acceso a información privilegiada así a difundirla.
Me parece que es fácil actuar como el resto de la sociedad, dejándonos llevar por el camino de lo sencillo pero incorrecto, pero es mucho más gratificante el dirigirnos de la manera más correcta en el camino escolar, ya que por el simple hecho de ser estudiantes somos diferentes a todos aquellos que no les importa el valor de la ética y créanme, sin importar de donde vengas, la decisión de hacer lo erróneo o lo correcto es personal y no social.
Miguel Rivera, FES-Aragón-UNAM
Por doquier vemos infidelidad, piratería, morbo, delincuencia, corrupción y otros actos inadecuados que a la vista del mexicano parecieran inofensivos e incluso algunos de ellos correctos; pero, ¿qué le vamos a hacer, si así es México?
Pienso que el país está tan viciado de estas situaciones que sería difícil revertir este pensamiento poco favorable de nuestra sociedad, la cuestión es que habemos un sector social que debe permanecer inmaculado ante estos pensamientos, un sector que día con día se prepara para hacer un país mejor y un sector que nos hacemos llamar universitarios no solo por asistir a una facultad de estudios superiores, sino también porque tenemos la dicha de formar parte de una clase que piensa de distinta forma al resto de la sociedad.
Es por ello que dentro y fuera del aula, nosotros los universitarios, debemos tener bien claro el concepto de la ética, pues esta nos invita a actuar con valores positivos como el respeto, la tolerancia, la honestidad, entre otros. Esto más aún cuando se recorre por un campo como el de la comunicación y el periodismo, donde la importancia de estos valores se duplica al tener la responsabilidad de ser quienes tenemos acceso a información privilegiada así a difundirla.
Me parece que es fácil actuar como el resto de la sociedad, dejándonos llevar por el camino de lo sencillo pero incorrecto, pero es mucho más gratificante el dirigirnos de la manera más correcta en el camino escolar, ya que por el simple hecho de ser estudiantes somos diferentes a todos aquellos que no les importa el valor de la ética y créanme, sin importar de donde vengas, la decisión de hacer lo erróneo o lo correcto es personal y no social.
Miguel Rivera, FES-Aragón-UNAM
No hay comentarios:
Publicar un comentario